El cártel de los sapos - Carlo Siliotto
Producida y emitida en 2008, “El cártel de los sapos” era inicialmente una serie de enorme éxito y popularidad en Colombia. Está basada en el libro del mismo título escrito por Andrés López y tres años después se convierte en una película para cine, manteniendo a los protagonistas e incorporando nuevos personajes.
Se centra en el mundo de los cárteles de drogas colombianos, en una etapa en la que algunos de sus dirigentes aceptaron la oferta de las autoridades para delatar a sus compañeros, convirtiéndose en “sapos”, para obtener penas de prisión reducidas.
La película combina drama, acción, intriga, dolor, pasión y romanticismo, lo que hace que la banda sonora deba moverse por terrenos musicales variados, en los que Carlo Siliotto utiliza toda la capacidad expresiva de la orquesta para crear una música intensa y emotiva.
La sonoridad del saxo aporta un tono desgarrado en muchos momentos, mientras que un tiple colombiano proporciona un discreto color local, al que la banda sonora suma sonidos electrónicos creados especialmente para la música de la película.
Se mueven fundamentalmente en el terreno de la percusión, aunque no buscan imitar instrumentos reales. Su aportación cambia dependiendo del momento y va desde los acentos puntuales para instantes concretos hasta la creación de texturas que se suman al resto de la orquesta.
La música posee la fuerza que remite a ideas de acción y riesgo y el tono melódico que requieren las escenas más personales. Esta combinación consigue un color musical especial, que integra vigor y belleza en un trabajo musical impecable.
La grabación con la orquesta se realizó en Sofía, la capital de Bulgaria. Carlo Siliotto no pudo estar presencialmente en la sala, por lo que en esta ocasión no dirige la orquesta, como suele ser habitual en sus composiciones.
Sin embargo, pudo supervisar toda la grabación desde Los Ángeles, conectado en tiempo real con el estudio en el que se estaba grabando. Pudo así proporcionar directamente las instrucciones a la orquesta y a su director, aportando ideas precisas para los intérpretes de su música.
La presentación de la película en EE.UU. se realizó en el Festival Internacional de Cine de Palm Springs, en el que la banda sonora tuvo una acogida muy favorable, a la que se sumó la obtenida en las presentaciones para prensa especializada que se realizaron con posterioridad.
No es extraño que el compositor consiguiera este reconocimiento inmediato por la música del film, puesto que se trata de un trabajo delicado y cercano, que actúa con precisión sobre las imágenes y que se disfruta en su escucha separado de ellas.
Juan Ángel Saiz